Es una especie de milagro
virtual, de repente ya no queda ni una sola persona fea en el globo terráqueo,
hoy en día todos los seres humanos son bonitos, hermosos, preciosos. Al menos
eso es lo que podemos leer todos los días en el Facebook cada vez que un
usuario sube una foto nueva, o hasta vieja, todos los que opinan la encuentran
bella… extraordinariamente bella. Y si es con los hijos sí es verdad que la
llama se enciende, los elogios para esa familia tan perfecta parecen un desfile
en tiempo de carnaval. Eso es lo que yo llamo una terapia destinada a subir la
autoestima humana.
Algunos estudios afirman que existen personas que pueden llegar a
deprimirse si sus contactos del facebook ignoran sus comentarios o sus
fotografías, y por el contrario, mucha gente encuentra gratificante que les
digan lo bien que se ven o le den un click de “me gusta” a sus comentarios. No
dudo que sea así, lo difícil sería saber cuantos en realidad le dan importancia
a los asuntos de las redes sociales. Mientras tanto ya estamos enterados que
gracias al facebook no queda nadie feo entre los seres humanos.
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