Hipólito no es un maíz.

Se equivocan los que expresan su confianza y alegría con el hecho, prácticamente ineludible, de que Hipólito Mejía sea el candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano, dando a entender que es fácil vencerlo. Hipólito ha demostrado que no es un flaicito al catcher, en cuanto a obtener votos se refiere, y eso no puede ser obviado. Independientemente de que en esta ocasión todo el mundo esté convencido de que los peledeístas (fraudulentamente) votaron por él en la pasada convencióndel P.R.D., Hipólito es un político veterano, exitoso empresario, hombre querido por el pueblo y goza de mucha simpatía entre los dominicanos.Esos factores pesan.

Si sumamos el carisma de Mejía al hecho de que ya ha sido presidente del país y a  que la situación económica y social dominicana tiene al pueblo sumido en un estado creciente de frustración y desconcierto, hay que concluir que Hipólito tiene muchas posibilidades de ser el próximo presidente dominicano.

Danilo Medina dijo sentirse feliz de que Hipólito sea su posible rival para el 2012 en los comicios presidenciales que habrán de celebrarse en Quisqueya la bella (lo de posible porque Danilo todavía no es candidato presidencial de su partido). Pero recuerdo un refrán que una señora campesina me enseñó hace tiempo, y luego comprobé, que dice: "Al que le dan una vez, le dan dos veces." Ya Hipólito derrotó a Danilo en el año 2000 con una ventaja abrumadora de más del 100% que los votos obtenidos por Danilo Medina en esa ocasión. Ese tipo de victoria no se ha vuelto a repetir en las elecciones presidenciales dominicanas. Incluso el mismo Hipólito, cuando perdió su intento reeleccionista, sacó más de un millón de votos en el 2004. En unas elecciones en las cuales el único que no sabía que no podía ganar era el propio Hipólito Mejía.

Si aún bajo esas funestas circunstancias, que todos los dominicanos conocemos, fue capaz de tener semejante apoyo electoral, es porque el hombre se las trae.

Yo tengo una teoría que he adoptado personalmente en mi experiencia de vida. Las riquezas y el poder son como esas fiestas en las cuales te colocan un sello al dorso de la mano cuando vas a salir de ellas y no se han terminado, para que puedas volver a entrar. Siempre digo que aquel que ha tenido riqueza y poder alguna vez tiene todas las posibilidades de volver a entrar a la fiesta, porque ya tiene el sellito marcado al dorso de la mano.

Además de Mejía, solamente existen dos candidatos seleccionados por sus respectivos partidos para que sean sus representantes en los comicios del 2012. Ismael Reyes, a quien todavía el pueblo no conoce muy bien, y Guillermo Moreno, que obtuvo más de 80 mil votos en el 2008 pero que no acaba de representar una opción firme de oposición en la cual el pueblo pueda sentirse reflejado. Su proyecto de gobierno, sus propuestas de educación y organización social, son las únicas que, a mi entender, darían a República Dominicana el cambio radical general que tanto necesitamos. Pero Guillermo Moreno tiene que trabajar muy duro para que los dominicanos estén dispuestos a darle unaoportunidad.

El PLD no tiene candidato todavía y el PRSC es un partido inestable e incierto, uno no sabe en que parará la cosa entre Amable Aristy y Morales Troncoso.

Por lo pronto ya Hipólito tiene el caballo ensillado, si todo se resuelve satisfactoriamente dentro del PRD Hipólito puede arrancar su campaña corriendo solo y por el carril de adentro. En política nada puede darse por un hecho hasta que no ocurra, eso es muy cierto, pero tampoco es menos cierto que Hipólito Mejía conoce los secretos para ganar porque ya lo ha logrado. Si sus rivales políticos quieren evitar su triunfo, lo mejor que pueden hacer es no subestimarlo. De lo contrario podría costarles muy caro. Si no pregúntenle a Miguel Vargas Maldonado.