Orgullo y determinación. Con ese nombre bautizó la pintora norteamericana Susan Miller-Havens al retrato que hizo de nuestro astro del béisbol, Pedro Martínez. Esas dos palabras encierran las principales cualidades que el oriundo de Manoguayabo exhibió en la llamada "lomita de los sustos." Un tipo de distinción que solamente se le otorga a los grandes, nos da una muestra clara de cuanto es admirado Pedro Martínez en la tierra del tío Sam y al mismo tiempo, hace que los dominicanos nos sintamos más orgulloso de este titán de la pelota.
Tanto dentro como fuera del terreno de juego, Pedro Martínez ha impartido cátedra de un comportamiento ejemplar. Su trabajo a favor de la juventud de su sector, donde actualmente se levanta un estadio que incluye un centro educativo que contribuirá con la formación de los jóvenes dominicanos de esa zona, es digno de admiración y un ejemplo a seguir por sus colegas y por empresarios y artistas.
El pasado viernes se desveló el retrato en el museo Smithsonian en Washington y una vez más Pedro Martínez sigue haciendo historia y elevando nuestra bandera tricolor. En dicho museo hay otros tres cuadros de jugadores latinoamericanos; Sammy Sosa, Roberto Clemente y el inmortal de Cooperstown Juan Marichal. Este último estuvo presente en el acto, al que también asistieron varios familiares de Pedro, incluídos su madre y su hermano Ramón Martínez.
Felicidades Pedro por este nuevo galardón. ¡Lo mereces!
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