Primeras medidas de Danilo.

 

Las medidas anunciadas ayer por el consejo de gobierno que encabezó Danilo Medina representan el primer paso del nuevo gobierno dominicano. A primera vista es un paso muy atinado, por lo menos muestra señales de principios de austeridad y de una clara diferencia entre el desgobierno que recién terminó y este que apenas comienza.

Como dijo Danilo Medina, ese es el programa de gobierno y está contenido en lo que él dijo el 16 de agosto en su discurso de juramentación presidencial. Con esto también respondió implícitamente las preguntas de los periodistas que, haciendo eco del clamor popular, insistían en saber el parecer de Danilo  con respecto al descontento que provocó en la gente el hecho de que tantos funcionarios del desgobierno pasado fueran ratificados o simplemente movidos de posición pero dejados en el tren gubernamental. Como quien dice, es algo similar a cuando Raúl Mondesí exhibía su greña en los estadios de grandes ligas y luego fue firmado por los Yankees. Como los mulos del Bronx tienen sus reglas estrictas, Mondesí tuvo que cortarse el pelo. En otras palabras, Danilo parece apostar a que los antiguos funcionarios acogerán sin pataleos todas las medidas del nuevo gobierno por él encabezado y dejarán atrás sus malas mañas.

Dice un refrán que donde manda capitán no manda marinero. Si Danilo quiere hacerse respetar, tiene todas las herramientas para conseguirlo. Yo vengo de pasar ocho años sin presidente. Sí, desde el 2004 hasta hace unos días yo no tuve presidente. Le voy a dar a Danilo el plazo de los cien días y esperaré con paciencia el resultados de sus primeros pasos. Si el hombre quiere resolver y lo demuestra entonces hay que apoyarlo. Si en cambio todo es buche y pluma nada más, seguiré por mi propia cuenta y sin presidente hasta el 2016 a ver si llega algo bueno. Mientras tanto, desde ahora y hasta el mes de diciembre, le concedo a Danilo el beneficio de la duda.