¡Rescaten la televisión dominicana!

Decir en televisión nacional que en República Dominicana hay que entrevistar al mismo artista cuatro veces al año porque es muy reducido el número de personas en los medios… ¡Puso un huevo de avestruz! Ni  siquiera imagino quien ella cre que puede creerle eso. Esas declaraciones las ofreció una productora que decidió cerrar su espacio televisivo por no sé cuantas razones infundadas, en vez de sólo decir que ella no estaba facturando, porque nadie veía su programa. Lo peor es que otra productora la secundó y abundó sobre el tema, diciendo que cada vez que ella tiene que entrevistar al mismo artista tres veces en un año se siente incómoda o algo así. Señoras, lo que ustedes tienen que decir a la gente que ve la televisión es que sus ideas sólo alcanzan a producir programas cuyos porcentajes de espectadores dependen directamente de la popularidad de los artistas que presenten en los mismos y no de las producciones que sus mentes conciben. Eso no es exclusivo de ellas dos, en realidad lo hacen la mayoría de los programas televisivos dominicanos. No producen absolutamente nada, se limitan a invitar a un artista que en los momentos actuales goza de cierta trascendencia y ruegan a Dios que la gente que sigue a dicho artista sintonice el programa esa noche. ¿Acaso eso se llama producir televisión? Todavía es más grave. Algunos programas ni siquiera invitan a los artistas que están sonando en la radio sino que sólo invitan a sus amigos o a la gente que le cae bien. Por eso es que no concitan ningún interés real del público en sus ofertas televisivas. ¡Claro! Ellos acostumbran a la gente a no ver sus programas cuando no lleven a alguien que tenga un tema sonando en la radio o que no esté envuelto en algún tipo de escándalo. Si no es así, entonces llevan a sus programas al mismo tipo que ha estado brincando y haciendo muecas en diez programas distintos esa misma semana… ¡Pobre televisión dominicana! Siempre lo digo: Freddy Beras Goico hacía un programa súper entretenido hasta sin invitar a nadie conocido, igual hacían Yaqui Núñez del Risco y/o Corporán de los Santos. Mucho tiempo atrás, a principios de los ochenta, Ellis Pérez y Freddy Ginebra, dos dominicanos pensantes, tenían cada uno un programa divertido, educativo y entretenido: uno se llamaba "Los recién casados" y el otro  "Dígalo como pueda". Habían programas de artistas como: el Combo Show de Johnny Ventura; Wilfrido en vivo; Solano en Domingo; Lope Balaguer en Romance; "Aquí nosotros" de Casandra Damirón; y algunos más. Todos con excelente contenido, buena música y gente común y corriente que sus productores convertían en protagonistas por un día. La gente aprendía mientras se divertía. Los artistas del presente no se atreven a ser conductores ni productores de sus propios programas, con excepción de los humoristas dominicanos, que son de lo mejor que tenemos en los medios. Mientras tanto, los productores de la televisión dominicana de la actualidad insisten en querer ser estrellas… estrellas que no cantan, no actúan, no bailan, no escriben, no producen, no piensan… ¡Vaya estrellas!

En República Dominicana hay más de 1000 profesionales del teatro; cientos de pintores, escultores y artistas plásticos en sentido general; cientos de excelentes deportistas; cientos de poetas y escritores, miles y miles de psicólogos, abogados, psiquiatras, bailarines, cantantes líricos y populares… aquí hay de todo y para todos los gustos. Pero, hay productoras de televisión que se quejan de tener que entrevistar al mismo artista cuatro veces en el mismo año… sólo porque no pueden pensar. Y eso, que tienen dizque equipos completos de producción. ¡Risible, en verdad risible!